Un Domingo más...

Uy...con tristeza y algo de enojo conmigo misma, me doy cuenta que tenía muuuucho tiempo de no venir aquí, de no escribir por escribir, de no inventar palabras. Hoy confieso...lo confieso, que soy una presa más de eso que llaman tiempo, estrés, pretextos. Es así, no hay otra cosa. Uno bien puede apagar la tele y escribir. Uno bien puede dejar de chatear y escribir. Uno bien puede dejar de hacer como que hace y no hace...je! pero bueno...creo también que lo importante es que estoy de vuelta. Espero que para quedarme...

Hoy no es un domingo más...o tal vez sí. Quise decir...hoy no ERA un domingo más...pero terminó siéndolo. Hoy, todos los mexicanos sufrimos la derrota que significaba ese ansiado quinto partido en la copa mundial de futbol. No importa contra quién, aunque bueno ya todos sabemos que una vez más ( además, para echarle más limón a la herida) fue contra Argentina.

Entonces, me pregunté...pensé...traté de entender. Porqué duele tanto? porqué a las mujeres nos duele tanto? se supone que odiamos el futbol!!!! porqué esperábamos con tanta ansia este domingo? porque nos vestimos de verde y nos pintamos la cara y porqué salimos a la calle con alegría y regresamos con el nacionalismo a cuestas como un costal de papas que pesa más que nunca?

Y poco a poco fui comprendiendo, o bueno, tratando de entender....que esto duele, porque somos un país en el que el futbol nos hace olvidar. Nos transporta. Nos vuelve héroes. Somos un país que quiere olvidar que tenemos malos gobernantes, que el dinero no alcanza, que hay analfabetismo, que hay gente que se muere de hambre, que el nivel educativo no alcanza, que los líderes sindicales son estafadores, que nos dedicamos a "la tranza", que en cada familia hay al menos un familiar que viajó a Estados Unidos, en busca de una oportunidad de vida más digna...encontrándose muchas veces nada más que a la muerte y otras, una supervivencia denigrante. Somos un país en el que hay que tener varios trabajos, somos un país de "los hijos que Dios nos mande"...aunque no tengan que comer. Somos un país de las residencias en los altos de las montañas y las ciudades perdidas, en el fondo de la cañada. Somos un país elitista, en el que las diferencias de color nos delimitan y nos asustan. Somos un país rico y pobre, somos un país de colores verde, blanco y rojo...pero también somos un país de negros, de grises, de café. Somos un país en el que la ignorancia a veces nos toma y no precisamente por necesidad, sino por elección. Somos un país donde habita el narco...donde ya no se puede salir en la noche sin miedo. Somos un país de secuestros largos y de secuestro express. Todas las modalidades. Somos un país de elecciones vendidas y compradas y de políticos de antaño que se venden como nuevos y de políticos nuevos que se vendieron y actúan como los de antaño.

Y en medio de tanta desigualdad y de tanta lucha perdida....está el futbol. Está un uniforme que nos viste a todos, está la porra que todos cantamos, está el himno con el que siempre nos emocionamos, está la bandera que nos enchina la piel de ver ondeándose a lo alto. Entonces, soñamos...y soñamos y nos creémos que podemos ser mejores, que escalamos, que caminamos, que cambiamos. Entonces entregamos súplicas, entonces entregamos promesas. Y entonces, todos estamos unidos...y esos 90 minutos, el país completo late al mismo ritmo. Esos 90 minutos, la esperanza crece. Esos 90 minutos, la pasión nos desgarra. No hay nada más, solo el futbol. No estamos preocupados por la crisis, no pensamos en las elecciones del siguiente domingo, no importan las deudas, no hay mañana...es hoy. HOY. Vivimos esos 90 minutos como si fueran los más importantes de la vida de cada uno...y entonces, cuando perdemos...es como si una avalancha se llevara todo...la ilusión, la esperanza, la alegría, la lucha, el camino avanzado.

Y duele...duele. Duele porque las sonrisas de todos los niños se quitan de sus caritas. Y ellos merecen mas que nadie tener esperanza...ellos serán los jugadores de la selección de mañana. Duele porque la algarabía se acaba, los carros ya no cantan, las banderas no se ondean y como dice la canción...los mariachis callan. Duele porque el tequila que era para festejar ya ni siquiera se termina. Todos a otra cosa, a lo de siempre, a un domingo más. Duele porque necesitábamos esa alegría! porque sí...es futbol...no es la vida...es un partido...pero....es nuestro equipo...es nuestra selección...es nuestro mundial también. No juegan 11 en la cancha...juegan millones, y millones perdemos, y millones ganamos, y millones cantamos y millones esperábamos ese triunfo, y millones vimos como se cayó el sueño. Duele porque queríamos extender un poquito más la estancia en esta "Isla de la fantasía"...queríamos seguir en la batalla, queríamos seguir en la terna, queríamos seguir más días con la camiseta verde puesta.

Duele porque se acabaron las sonrisas de todos, duele porque un silencio sepulcral cayó, duele porque nos merecemos ese triunfo, duele porque aunque somos más que el futbol, el futbol nos hace uno, duele porque han sido tiempos duros, han sido tiempos difíciles y somos gente buena, somos gente que lucha, somos gente que se da, que se brinda...entonces, porqué no? ...Duele porque un domingo la familia se reúne porque sí, pero cuando juega la selección, la reunión es obligada...y duele porque miles de mexicanos invirtieron en un viaje para ver su sueño en vivo...y duele porque crecemos aprendiendo que hay que estar orgullosos de nuestros colores, de nuestra gente, de nuestra historia, de nuestra patria. Duele porque estamos festejando 200 años...duele porque ahora...otra vez...los periódicos se llenarán de nota roja, de balazos, de complicidad de la delincuencia organizada con el gobierno en sus diferentes niveles, los partidos políticos escupiéndose su basura....la basura que hoy está encima de todo. Y duele porque es eso lo que pasa...que lo que está encima, es la basura...que se hizo grande, que no supimos quitar, que no supimos limpiar. Entonces, hasta abajo está apenas asomándose la gente y las acciones que valen y que buscan un país mejor....y mientras tanto...teníamos al futbol.

El futbol es esa cosa de ir tras la pelota y hoy, creo que la pelota son esos sueños, son esos anhelos, son esos deseos del alma de cada buen mexicano, porque habemos MUCHISIMOS buenos mexicanos! y cada uno de esos buenos mexicanos tenemos un sueño....que inconcientemente, transformamos en una pelota y pateamos, al menos en espíritu, al igual que los 11 jugadores que vemos en el campo.

Hoy, México está triste...perdimos un partido, sí. Perdimos el sueño, sí. Pero también...hoy, quisiera comenzar sin atacar al técnico ni a los jugadores. Quisiera comenzar mi regreso a la vida real, a mis propios sueños, a mis propios anhelos, buscándoles otras puertas, buscándoles otra manera de poder hacerlos realidad. Hoy, quiero recordar lo maravilloso que sigue siendo ser mexicano. Hoy quiero recordar que debajo de la basura que tenemos encima y que es todavía difícil de limpiar, está esa sonrisa franca, está nuestra música, están nuestras tradiciones, nuestros valores, está nuestra capacidad, está nuestra lucha de cada día, están nuestros niños y también nuestros ancianos. Hoy quiero recordar nuestra comida, nuesta bendita bebida, nuestro mariachi. Nuestros campos, nuestros mares, nuestros ríos, nuestras montañas. Hoy quiero recordar que somos un pueblo de gente grande y que lo que está encima de nosotros, es basura...y que cada uno, podemos ir quitándola de nuestra cabeza.

Hoy escojo que me gustó apoyar a mi selección. Sin importar el resultado...porque aunque merecemos ese triunfo...seguiré luchando por alcanzar los míos propios. Y ahí, ahí también ondeará a todo lo alto la bandera tricolor.

Feliz semana....

p.d. ofrezco disculpas por el enajenamiento y la posible cursilería. No puedo ( ni quiero) hacer nada por cambiar esa parte de mí.

Quiénes somos?

Después de un mes casi...de vuelta. Uno no debería dejarse acorralar por el estrés. Uno no debería dejarse cegar por el trabajo y pensar que somos solamente eso. A veces nos preguntan, y tú quien eres? ...inmediatamente contestamos nuestro puesto en la empresa. No nos describimos, no nos exponemos, quizá ni siquiera lo sabemos a ciencia cierta. Pero...quienes somos? a dónde vamos? qué buscamos? No es una pregunta sencilla...muchas veces nos descubrimos haciendo cosas porque sí, nos descubrimos siendo una persona que va en contra de su propia naturaleza, nos esforzamos por ser quien no somos para darle gusto a otros....nos atrapa todo...la cotidianeidad, las leyes de la sociedad, las expectativas de los demás, nuestros propios miedos, nuestros olvidos, nuestro ego.

La semana pasada estuve en Los Cabos, atendiendo el evento de uno de mis clientes. Es un lugar fascinante, hecho por gente no local, hecho por aventureros que un día se arriesgaron y buscaron un nuevo horizonte ahí....buscaron una nueva oportunidad. Entonces pensé en los bloqueos, en los lazos, en los obstáculos que nosotros mismos nos ponemos para no ir hacia donde queremos, para no quedarnos simplemente con lo que hoy tenemos.

Cada uno, dentro, tenemos una verdad que nos habla, que nos dice lo que realmente somos, el lugar al que queremos caminar, el sueño que queremos hacer realidad. Arriesgarse es aprender, es también enfrentarnos a nosotros mismos y a nuestro mayor enemigo, nuestro ego. Arriesgarse significa crecer porque tomamos decisiones concientes y sus consecuencias. Arriesgarse, también significa tener fe...significa creer en que, una vez que nosotros hagamos lo nuestro, lo que nos toca, lo demás, lo demás está en manos de la energía del universo. Arriesgarse significa ver el futuro no como una angustia constante sino como una promesa que nos sonríe.

Si una vez en la vida al menos nos detuvieramos a pensar, a sentir, a dejar que nuestra verdad hable...tendríamos la posibilidad de saber si estamos en el lugar que queremos estar, que en otras palabras, es el lugar correcto, con la gente correcta, con los sentimientos correctos. Correcto no es aquello que es aprobado por los demás. Correcto, es todo aquello que nos hace genuinamente felices, que nos da paz, que nos da alegría verdadera, que nos hace sentir bien con nosotros mismos, que nos mantiene vivos y con ganas de sonreír. Es todo aquello que viene del corazón, que es nuestra naturaleza de amor.

Si hoy pudiera hacer una oración, diría, pediría, que todos encontremos la posibildad de encontrarnos con nosotros mismos y ser quien realmente queremos ser, asumiendo todos los riesgos y emprendiendo los caminos que nos queden por delante, por largos o difíciles que sean.

Amor y amistad? o mercadotecnia y cursilería...



Estoy en ese dilema desde hace muchos años de no saber si creer o no en el día de San Valentín...es otra costumbre gringa que nos ha llenado de ansias de comprar dulces, flores, chocolates y regalos caros, para hacer sentir bien al otro? Es una oportunidad de acercarnos a quienes queremos y recordarles lo mucho que significan para nosotros?


Mmm....no estoy segura. Me parece que las dos posturas son válidas....tal vez me patee algún escéptico...o tal vez me odie algún romántico empedernido, pero bueno; tengo mis motivos para darles la razón a ambas partes.

Las leyendas nos hablan del origen de la celebración de esta fecha en lugares distintos, sin ninguna relación...desde los pueblos nórdicos, pasando por los romanos, hasta la ejecución de San Valetín, un sacerdote que apoyaba a uno de los emperadores a oficiar bodas en secreto, pero que trató de guiar a los fieles hacia el cristianismo, ganando así su castigo. Hoy en día, no conocemos a ciencia cierta este origen...ni siquiera sabemos quien es San Valentín. Día del amor y la amistad...nos dicen...y nos venden esta idea de que entreguemos tarjetas en forma de corazones, bombones, chocolates.....o que "demostremos" nuestro amor con infinidad de regalos que se adquieren tras aparadores que requieren solo una cosa para poder obtenerse: dinero. Entonces volvemos a la pregunta....el amor...se demuestra con dinero? De que se trata este día? de comprar? de ser parte de un círculo que se rinde ante la mercadotecnia? de valorar a nuestras parejas por el precio del regalo que nos den? por el tamaño del ramo de flores? por la fila del exclusivo restaurant que visitemos? Pareciera que quien no entra...no pertenece al círculo del amor...no es digno de decir te quiero....no se puede llamar a sí mismo "amoroso"....no es una tontería??? me pregunto sinceramente...no es una tontería? no conocemos el significado de la fecha...no entendemos bien a bien porqué celebramos....peor aún...para hacerlo menos doloroso para aquellos que no tienen una pareja en el momento...lo llamaron después...( para que no fuera tan dolorosamente exclusivo) ...día del amor y la amistad..y entonces, todo aquel que tenga al menos un amigo....tiene algo que celebrar...pero eso sí...con la respectiva tarjeta, regalo, celebración....es un tanto cruel...no?

Y ahora los románticos...los dulces, los soñadores, los enamorados empedernidos. Ellos...ellos sacan de su corazón sus mejores poemas, las canciones que nunca antes escribió, se quitan su saco para que ella no tenga frío, y ellas se arreglan como princesas para agradarlos. Encuentran en este día, una magnífica puerta que se abre...que les permite acercarse con el pretexto perfecto y poder decir...siempre te he querido...pero no me atrevía a decirlo. Tal vez, se atreven a tomar su mano...talvez se atreven a contar ese secreto que duele....a pedir perdón...Tal vez, este día...el día del amor...el por fin le pide que permanezca a su lado para toda la vida, junto con unas rosas rojas...imposible decir no! ...Tal vez, aquellos amigos que no han hablado por años, en este día, por fin...puedan darse un abrazo, de esos que parece que no terminan nunca...Válido, verdad??

Al final...el amor es una decisión. El amor es una elección....nadie lo puede comprar, nadie lo puede vender. Nuestras historias personales nos llevan a esperar una fecha especial o bien, a rechazarla. Al final, y también al principio...el amor es el sentimiento más grande, más puro, más natural que existe....nosotros, cada uno, somos un hecho de amor, somos un regalo de amor. Y ese amor...no tiene tiempo, ni espacio, ni un momento ni se encontró en una tienda. El amor es...solamente..es. Y ciertamente, podemos mostrarlo a quienes amamos en cualquier momento, en cualquier día, en cualquier noche...y podemos inventar algo espectacular y cubrir la cama de pétalos de rosa...o simplemente, podemos mirar a los ojos a esa persona y decirle desde el fondo del corazón...te amo. No importa el dinero...no importan las flores de colores...no importan las joyas ni los peluchas. Personalmente...mi mejor regalo es un corazón abierto, es una mirada tierna, una caminata tomada de su mano, una sonrisa sincera, una carcajada llena de complicidad. Hoy...no podría ser más feliz..porque siento la respiración del hombre que amo a mi lado, mientras escribo...durmiendo plácidamente, confiado y tranquilo. Eso, para mí...es felicidad...no necesito nada más.

Y qué importa si queremos ser "cursis"? quien nos juzgará? quién nos criticará? nadie...la verdad es que muchas veces, el mayor miedo al que nos enfrentamos es el temor a nosotros mismos. Así que...festejar o no San Valentín...ser cursis o no...me parece que todo está bien, siempre y cuando nuestros actos, nuestros pensamientos y nuestras palabras sean congruentes y vengan del corazón.

Quieres ser cursi? Atrévete!!! ríete de tí mismo...date esa oportunidad...
Prefieres hacerlo hoy? o el lunes? u otro día? ....También está perfecto....
No necesitas dinero...solo necesitas corazón.
Feliz noche de sábado...está bellísima, asómate a la ventana.
Isadora.

La primera...va de nuez....

Segunda y se va corriendo.


Me había aventado un "rollote"....jajaja...pero...se borró todo...así que comenzaré de nuevo pero seré mas breve. Este día, me atreví a escribir para otros, para quien quiera venir, para quien pueda, quiera, regalarme un poco de su tiempo y aventurarse conmigo a esto de las letras, esto de la prosa, esto de la redacción, esto de la narración.

Desde niña escribía, y hasta hoy finalmente, decidí, casi sin pensarlo que era momento para compartir....ojalá sea una buena idea no solo para mí...sino para aquel que se ubique del otro lado del monitor. Desde ya, agradezco su paciencia, su compañía, su empatía.

De qué hablar? hay tantas cosas que decir, hay tanto que ver en el mundo, hay tanto que contar, historias personales y también otras que uno ve desde la barrera, hay tantos sueños por compartir...no podría cerrarlo a un solo tema. Seguramente, a veces hablará mi mente, a través de mis ojos y lo que ven, y como lo ven. Otras, hablará mi corazón, a través de mis sentimientos mostraré lo que percibo o lo que otros perciben. Algunas ocasiones hablará mi paladar, porque creo que en la cocina se cocina el amor a fuego lento, el amor que se sirve en la mesa y que después se lleva a la cama. También a veces intentaré interpretar a otros, a sus mentes y sus corazones, con nombres reales o no...y otras veces compartiré alguna de esas tantas cosas "raras" que en mi caso, no lo son tanto, pero que no le ocurren a casi nadie, je!

Desde hoy, ya siento un ligero estremecimiento, un ligero aire de amor por este espacio que sé, intuyo, tengo la certeza...irá creciendo día a día. Paso a paso. Hasta hoy, escribí para mí, escribí para mi familia a veces, para mis amistades, para mi amor. Escribí algunos cuentos que están guardados y que han tenido un solo lector. A partir de hoy...abro de todo corazón las puertas de esta puerta, que es parte de mí, que intento hacer crecer, a la que intento dar más. Estar aquí, me da esperanzas y me da alegría porque me recuerda, me confirma, que los sueños están ahí, al alcance de nuestra mano, que las puertas se abren con nuestra propia mano, que nuestros miedos, bloqueos, saboteos, se terminan cuando nosotros decidimos, porque nosotros mismos guardamos las llaves, solo es cuestión de encontar la llave justa entre tanto cerrojo, entre los cajones viejos, entre los escombros de nuestro pasado.

Hoy ha sido un Domingo increíble...una tarde de sol en la que los volcanes se dejaron ver imponentes, bellísimos, en la que esta mujer dormida nos mostró sus cabellos al viento, y el Popo le entregó una vez más su amor firme, permanente, eterno. Qué historia de dos que se amaron y la leyenda nos abraza contando esta historia de amor eterno. Tarde de sol, tarde de viento, noche de estrellas.

Así...antes de que se vuelva a borrar todo lo escrito en los párrafos, doy gracias al universo por permitirme estar aquí....ojalá nos permita compartir mucho a partir de hoy.
Aquí, comenzamos!
Feliz resto de este domingo...
Felicidades a los Santos!
Feliz noche, feliz vida.

Isa.